Hasta hace pocas semanas el Chelsea se encontraba en medio de una crisis
futbolistica que auguraba una de las peores temporadas en
los últimos años. Fuera de la pelea por el titilo de la Premier
League e incluso por fuera de posiciones europeas, el equipo londinense se
encontraba muy lejos de un nivel competitivo a nivel continental. Ante
esto se tomo la decisión de separar al técnico portugués André
Villas Boas y colocar a Roberto Di Matteo
como entrenador interino hasta el final de una temporada donde
todo parecía perdido. Sin embargo,
en cuestión de días el estratega italiano logro levantar al
equipo anímica y futbolisticamente. Los resultados de inmediato
comenzaron a aparecer y así el equipo de Stamford Bridge supero
agonicamente al Napoli y al Benfica para meterse semi finales de la Champions.
En la previa de la serie ante Barcelona, el equipo catalán se
presentaba como el claro candidato a llegar a la final. Di Matteo planteo un
sistema ultra defensivo tanto en Inglaterra como en España,
resultando en un planteamiento asombrosamente efectivo. El Chelsea,
con un solo remate al arco contra 26 del Barcelona, logro ganar el partido por
la mínima diferencia. para el partido de vuelta los aficionados
ingleses esperaban con optimismo un resultado positivo, pero nadie se
imaginaria la hazaña que realizarían los jugadores ese dia
en el Camp Nou. El Equipo de Di Matteo, liderado por Frank Lampard, no solo
logro aguantar la embestida de Messi y sus compañeros, sino que logro
igualar con 10 hombres un partido que en media hora lo perdía por dos
goles. El Chelsea silenciaba al mundo eliminando al mejor equipo del mundo en
su propio reducto y demostrando que el fútbol no es sino
la dinámica de lo impensado.
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